Si sólo vas a hacer una cosa en San Luis Potosí, el recorrido de la Cascada de Tamul es el que debes hacer!

La cascada de Tamul tiene una altura de más de 50 metros y hay dos formas de visitarla:

La primera es un Recorrido Familiar:

Tomas una lanchita en el pueblito de Tanchinchín o La Soledad y remas río arriba una hora hasta llegar a la cascada. No la puedes ver de cerca porque la corriente es muy peligrosa, así que la admiras desde unos 150 metros de distancia (desde aquí es donde se toman la foto representativa de tamul). Este es el recorrido más popular para visitar la cascada de Tamul.

La segunda manera de visitarla es haciendo un Recorrido Extremo:

Si has leído mis posts sobre turismo extremo sabrás que a mí en lo particular me gustan mucho las experiencias que retan tu capacidad física y mental, por lo cual no es de sorprender que este recorrido sea mi favorito entre las dos opciones que aquí describo. Para hacer este recorrido primero debes considerar lo siguiente:

a) Si está lloviendo o ha llovido mucho en los últimos días y vas en un auto normal, es decir, no todo terreno NO te vayas en tu auto por el camino de terracería. Antes de tomar el camino de terracería puedes rentar una camioneta todo terreno. Si te vas en tu auto es muy probable que te quedes atascado en el lodo.

b) Es una experiencia 100% recomendable si llevas niños MAYORES de 12 años y NO vas con adultos mayores porque el recorrido, especialmente la segunda parte para bajar a la base de la cascada, es bastante pesado debido a que tiene escaleras verticales con espacio de unos 50 cm entre cada escalón, lo cual las hace muy pesadas de subir y bajar incluso para adultos jóvenes.

Dicho lo anterior, si después de éstas consideraciones todavía tienes la intención de hacer el recorrido extremo las instrucciones para llegar son:

Tienes que tomar el camino de terracería que inicia en el pueblo de El Naranjito (da click aquí para ver la ubicación exacta) y, unos 2 o 3 kilómetros más adelante, cruzar una propiedad privada en donde te cobran alrededor de 10 pesos por persona.

Continúa  el camino un kilómetro más. Verás 3 caminos: debes tomar el de la DERECHA (yo no vi ningún señalamiento pero le atiné de pura suerte).

Como un kilómetro más adelante llegarás a la orilla del río en donde tendrás que dejar el auto y tomar una lancha para que te cruce al otro lado del río (te cobran unos 20 pesos por persona).

Por último, tendrás que cruzar a pie otra propiedad privada (te cobrarán unos 10 pesos por persona) y es aquí en donde comienza el recorrido de trekking a las orillas del río, hasta llegar a la cascada de Tamul. Durante el recorrido encontrarás varias albercas naturales en donde puedes refrescarte.

En este Recorrido Extremo la vista de la cascada es desde el lado opuesto al que la ves en el Recorrido Familiar (la foto clásica de la cascada que siempre ves en revistas).

Con la información que aquí te doy no es necesario que contrates ningún guía a menos que desees explicaciones detalladas del lugar.

Lo más impactante de este recorrido es que puedes admirar la cascada desde su parte superior (desde a un costado), así como desde la parte inferior a menos de 50 metros de la caída de agua. Muchísimo más cerca que desde las lanchas en el recorrido familiar.

Definitivamente nunca he visto una cascada natural tan grande desde una distancia tan corta, literalmente la brisa del agua que cae al fondo a unos 50 metros más abajo te moja la cara. La imagen no captura de ninguna manera la experiencia de estar ahí. Es algo que sólo puedes saber cuando estás ahí.

Cascada de Tamul (arriba)

Cascada de Tamul (arriba)

Una vez que te limpies la baba de la impresión de esta cascada es momento de continuar el camino para poder admirarla desde abajo (mucho cuidado con las escaleras!).

Cascada de Tamul (abajo)

Cascada de Tamul (abajo)

La bajada es pesada, pero la subida lo es mucho más. Por esta razón, te repito, NO es recomendable para niños pequeños o personas mayores, ya que muy probablemente no puedan hacer el recorrido completo por su seguridad.

Te recomiendo llegar a este lugar alrededor de las 3 de la tarde para que puedas ver los arcoíris que se forman con la luz del sol que va cayendo y le pega a la cascada de lado y los colores que toma en agua del río con la luz del atardecer. ¡Un recorrido inolvidable!

Me impresionó mucho más incluso que las cascadas del Niágara que, por cierto, ni siquiera son naturales sino el resultado de una presa creada por el ser humano.

¡¡Que lo disfrutes!!